Gato hueón
A ver... han llegado muchas cosas a mi vida en estos dos últimos meses en que la flojera me tenía desconectado (sorry Vivi).
Primero llegaron el par de locas, la Ale sigue igual, gritona, desordenada y jura que yo soy perro (esta fuma de algo que no convida), la Sole no, esa llego distinta... ya no tiene dreds y parece que se comió una sandia entera... y el otro día me subí a su panzota, y algo muy extraño pasó, la panza se defendía a combos y patadas de mi... esto es muy raro... quizás que fiebre tropical la agarró por andar metida en esas selvas de seres incivilizados.
Bueno, la llegada de este par, además de la llegada de la maldita primavera hizo que de la flojera pasara al relajo, quiero disfrutar lavida, ser rebelde (nada que ver con esos Mexicanos fresas que salen en la tele), ser un gato cool, así que decidí dejarme dreds, ser un gato rasta, no me peino más!!! adios a la esclavitud del cepillo, no más Pantene para pelito lindo de gatito... les daré cobijo a mis pulgas (la mala de la Vero las saca y las hace añico)...
Mi rebeldía me duró como dos días... hasta que la Vero se dió cuenta de que empezaban a aparecer los dreds, y la muy vaca, agarró el cepillo (que es metálico), y al igual que hizo con la Sole (despues me enteré que ella le quitó los dreds a la Sole) le dió al ataque del cepillo asesino, y me dejó como la pantera rosa despues de salir de la secadora... que conste que yo me defendí, tiene almenos unas 3 cicatrices nuevas.
Pero eso no es lo peor... a Max se le ocurrió la brillante idea de que yo debo morir de calor y me quiere rapar!!!... ahí si que no, si llega a acercarme la máquina rapadora que se pasa la Mentxu por las piernas, lo hago visitar al mismo doctor que se quedó con mis bolitas!!!!
Como dijo la Trevi antes de que yo naciera... "ami me gusta andar de pelo suelto"
Todo comenzó una tarde en que mi amigo Hueso me invitó a comer pejerrelles a su casa.... yo aún era un cachorro, que disfrutaba de la vida de vagancia y libertad, más que nada, pienso, porque no tenía idea lo que era disfrutar de las bondades del patrón de fundo (en este cso de departamento).
Hueso ya me había contado varias veces que tenía 3 sirvientes en su cómodo departamento de Ñuñoa, que le preparaban la comida, le hacían la cama y que incluso jugaban con él, aunque no quisieran... (las órdenes del amo que le dicen). Tres mujeres trabajaban para él.
Subí con él hasta el 4º piso del antiguo edificio, y ante la voz del amo, se abrió la puerta. Al principio no me atreví a entrar... me dió una suerte de claustrofobia entrar en este sitio que no tiene ninguna salida directa al suelo. Cuando me decidí a entrar, dije las palabras mágicas que había pronunciado mi amigo para que se abriera la puerta, pero no funcionó. Me imagino que funcionaría solo con su timbre de voz... volví a intentarlo un par de veces, y curiosamente se abrió otra puerta, de la que salió un niño con un plato de leche... (miau... esto me está gustando)...volví a intentarlo a ver si aparecian los pejerreyes que me había prometido Hueso, pero solo leche salía de ese lugar.... seguí intentándolo hasta que las cuatro puertas se abrieron, y cuatro personas salieron, pero sin pejerreyes (se me estaba yendo en collera el sistemita)... todos me miraban muy extrañados... hasta que salió mi amigo Hueso y me invitó a entrara a su departamento.
Como nunca logre aprender la contraseña para que se abriera la puerta del departamento correcto... mejor no salí nunca más.....
(continuará)